Se espera para el año 2030, que  la Acuicultura aporte el 67%  de la alimentación de pescado  a nivel mundial, y se mantenga o aumente la tasa de crecimiento del sector, pero esta actividad genera situaciones como: el incremento de peces/jaula, la desmejora de la calidad del agua, la aparición de lesiones, que lleva al estrés y afecta al sistema inmunitario; se generan   infecciones y muerte de peces y sus efectos sobre la rentabilidad del negocio acuícola.

Se ha utilizado la vacunación y administración de antibióticos, para mejorar el sistema inmunológico de los peces, prevenir enfermedades o infecciones, y  disminuir la mortalidad. Tiene  también aspectos  negativos, ya que no funciona ante patógenos intracelulares, es específica, cara y genera  estrés por la manipulación manual y las pocas vacunas comerciales disponibles.

Por otro lado, se utilizan antibióticos, como profilácticos, promotores del crecimiento y con fines terapéuticos. Se han añadido al alimento, disueltos en el agua o en inyecciones, pero también generan problemas para los peces, humanos y el medio ambiente. Primero, los antibióticos se acumulan en los peces y transmitidos a los humanos, luego, las heces de los peces acumulan trazas de antibióticos y las bacterias marinas están en contacto con concentraciones no letales de antibióticos, que propician el desarrollo de bacterias multiresistentes, que afectan a peces y humanos.  Por lo tanto, se están buscando sustitutos que apoyen el desarrollo sostenible. La investigación se dirige entonces, a conseguir posibles sustitutos de los antibióticos, como inmunoestimulantes  naturales, como profilaxia, para fortalecer el sistema inmunitario de los peces.

Entonces la fitoterapia, o uso de plantas medicinales, se plantea como alternativa al uso de antibióticos. En este sentido, se desarrolló una tesis doctoral, para estudiar la posibilidad de la utilización de plantas, o sus compuestos, para su aplicación directa en la acuicultura, con tres objetivos específicos. Uno, evaluar los efectos in vitro  de diferentes extractos de plantas, dos, evaluar los efectos in vivo, y tercero, evaluar la actividad bactericida y el efecto in vitro de compuestos idénticos a los naturales y su efecto en vivo, como aditivos alimentarios, para posibles sustitutos de antibióticos.

En el objetivo uno, se consiguió que con diferentes concentraciones   de extractos acuosos y etanolicos de las plantas de orégano, semillas de planta datilera, verdolaga y moringa, mostraron capacidad inmunoestimulante y promovieron la división celular.

En el objetivo dos, se demostró que los extractos de plantas, pueden inhibir el  crecimiento de células tumorales, así como una fuerte actividad antibacteriana.

En el objetivo tres, los fitoquímicos mostraron in vitro, una  fuerte actividad  antibacteriana, sin efectos adversos sobre la viabilidad, y  en vivo, mejoran el crecimiento y los parámetros inmunitarios.*

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*información tomada de Revista AquaTIC, nº 58 – 2020 – Especial Tesis 2019 Revista científica de la Sociedad Española de Acuicultura 10 Revista AquaTIC, 58, pp. 10-14. Año 2020 ISSN 1578-4541