Los océanos y ríos del mundo, son las respuestas para aumentar  la capacidad de producir alimentos en el planeta, y la Acuicultura  es una herramienta para contribuir a la alimentación de 10 mil millones de personas, que poblaran la Tierra en el año 2050.El reto para los próximos 30 años, es incrementar la producción de alimentos, para 3 mil millones de personas adicionales.

En el caso de los océanos, hasta ahora,  tienen una contribución modesta con la pesca extractiva;  un 17% de la demanda mundial de proteína .Se requerirá para los próximos años de la Acuicultura, para poder seguir respondiendo a la creciente demanda de alimentos. Ya se observa como tendencia, que comercializadores de productos marinos, ofertan más pescado de la acuicultura que de la pesca ,y que las empresas transformadoras, apuestan por los pescados y mariscos de la Acuicultura, por razones de conveniencia, temporalidad,  homogeneidad de tallas y calidad. La Acuicultura, también está poniendo énfasis en la sostenibilidad y consiste en definir   las especies y los espacios, que deben liderar este camino.

La actividad regulatoria es parte responsable de la sostenibilidad, y separa las regiones entre aquellas altamente reguladas como USA y Europa y las muy suaves como China, India o Tailandia. La regulación exagerada en empresas de Estados Unidos y Europa, al final afecta a los consumidores. Este factor dificulta poner en marcha empresas acuícolas, por el entramado gubernamental, y en consecuencia no se satisface la demanda local de pescados o mariscos y se tiene que recurrir a otros países con legislaciones más suaves. En consecuencia, los consumidores norteamericanos y europeos, demandantes de proteína marina, tienen que proveerse de países con regulaciones más débiles, con prácticas donde la sostenibilidad y seguridad alimentaria no cumple con los estándares autoimpuestos en los países desarrollados.

La situación lejos de mejorar tiende a empeorar, en un marco en que el cambio climático y la acidificación de los océanos, impactara de manera importante en las pesquerías del planeta. Las zonas donde existe poca producción de la maricultura y más dependiente de la captura de peces como el continente africano, serán los más afectados por el cambio climático.

Es importante señalar, que con pequeños espacios que se ocupen, se puede producir una gran cantidad de alimentos acuáticos.  Un estudio de investigadores de la Universidad de California, publicado en Nature, señala que con la ocupación del 3% de la ocupación de la Zona Económica Exclusiva de un país , se puede satisfacer la demanda de sus consumidores, esto debido a la eficiencia de la Acuicultura, con una menor huella de Carbono, y menor demanda de agua y tierras, comparado con las fuentes terrestres para producir alimento.

Con los avances  de la investigación acuícola, que produzca mejoras en la reproducción, crianza y alimentación de peces y mariscos, se mejora el rendimiento productivo, y se podrá satisfacer la mayor demanda de los consumidores en el mismo espacio.

La consigna a proponer es “Salir a cultivar el mar, lagos y ríos”.

En Piscicultura Global (www.pisciculturaglobal.com)  unimos esfuerzos y talento técnico para ofrecerles a ustedes acuicultores, la oportunidad de crecer juntos.

Referencia

misPeces.com